By Mar Alagarda.
Una de las lesiones sobre las cuales más me suelen preguntar los bailarines son las Hernias Discales. ¿Qué son? ¿Por qué se producen? Y ¿Qué puedo hacer para no tener hernias? Son algunas de las preguntas que me hacen.
¿QUÉ SON?
Las Hernias Discales son, a groso modo, la rotura del disco intervertebral (DI).
Si recordamos, en la Columna Vertebral tenemos una serie de huesos llamados vértebras y entre cada dos vértebras hay un DI.
Imagen 1. El Disco Intervertebral.
Los DI son las almohadillas, con forma más o menos redondeada, que hay entre cada dos vértebras.
Si miramos un DI desde arriba, podemos ver que tiene dos zonas claramente diferenciadas: un anillo fibroso y un núcleo pulposo.
-El anillo fibroso es un anillo que rodea el núcleo y está formado fundamentalmente por láminas concéntricas de colágeno tipo 1 (un tipo de proteína muy resistente).
-El núcleo pulposo es una masa gelatinosa que se encuentra dentro del anillo fibroso y está compuesta principalmente por agua (en un 80%).
Esto significa que la parte externa del disco es más dura y resistente que la parte interna.
Cuando el anillo (la parte externa) se fisura, el núcleo (semejante a un líquido) tiende a salir hacia fuera. Y al entrar en contacto con los tejidos circundantes, los irrita y produce dolor. Si por ejemplo contacta con un nervio se producirá irradiación hacia las extremidades.
Imagen 2. El anillo fibroso y el núcleo pulposo.
¿POR QUÉ SE PRODUCEN? ¿CÓMO PUEDO PREVENIRLAS?
Recordemos que un factor importante a la hora de prevenir lesiones de espalda era mantener las 4 curvas fisiológicas de la columna. Para que los Discos no sufran es importante que no reciban más peso del que pueden soportar. Por lo tanto, mantener una correcta alineación es fundamental.
Aquí os dejo el link de un artículo que publiqué, donde explico la importancia de mantener las 4 curvas:
Imagen 3. Por qué son importantes las 4 curvas.
Además, cuando un bailarín ejecuta, la columna se mueve a gran velocidad y muchas veces sin control. Este exceso de “hipermovilidad” también puede dañar los discos intervertebrales. De ahí que sea tan importante fortalecer la musculatura profunda de la columna vertebral.
ILUSTRACIONES: Josep Antoni Gilabert Carmona
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